Situada en el extremo oeste de Francia, Bretaña es la tercera región turística más grande de Francia. Con el 42% del litoral francés y lugares de fama mundial, como los menhires de Carnac, el puerto de Saint Malo o la costa de granito rosa, ¡este destino hará las delicias de grandes y pequeños! Si está planeando pasar sus vacaciones en Bretaña, aquí tiene algunas ideas de lugares imprescindibles para visitar.
Visite las Costas de Armor, una estancia a la vez enérgica y relajante
¡No puedes explorar Bretaña sin visitar este departamento! Con sus sitios emblemáticos y atmósferas únicas, este auténtico departamento le ofrece una estancia energética y relajante. Si estas considerando pasar unas vacaciones en Côtes-d’Armor, aquí tienes una selección de sitios imprescindibles:
La Costa de Granito Rosa
Famosa por sus rocas de colores, esta costa natural de 10 km es sin duda uno de los lugares más conocidos de Bretaña. Ella es auténtica, acogedora y magnífica. Se extiende desde el pueblo de Perros Guirec hasta Trébeurden y ofrece numerosas actividades, incluido el descubrimiento de la Faro de Ploumanac’h, el picnic en la playa de St-Guirec y la visita a la isla grande y sus paisajes de guijarros.
La bahía de Saint-Brieuc
Situada entre la tierra y el mar, salpicada por sus tres valles, Douvenant, Gouët y Gouédic, la bahía de Saint-Brieuc ofrece numerosas actividades para realizar durante las vacaciones, como pescar a pie durante la marea alta, visitar la yeguada de Tional en Lamballe o el playas tranquilas de Binic y Pléneuf-Val-André.
Cap Fréhel – Cap d’Erquy
No podrás evitar quedar deslumbrado por este grandioso sitio formado por el cabo Fréhel y el cabo d’Erquy. Además de apreciar los paisajes únicos de este impresionante lugar, allí también te esperan muchas actividades, como la pesca de vieiras en el puerto de Erquy, la visita al Fuerte La Latte o la escalada al lugar Natura 2000.
Ille-et-Vilaine, un destino entre tierra y mar
Situado al este de la región de Bretaña, Ille-et-Vilaine es uno de sus cuatro departamentos. O se trata de monumentos históricos Testigos de una época muy lejana, de su mágico bosque o de sus excepcionales costas, este destino está lleno de joyas a descubrir. Por su nombre, que evoca el color de sus aguas, ¡la Costa Esmeralda no tiene nada que envidiar a su vecina Morbihan! Esta costa está decorada con playas más hermosas de Ille-et-Vilaine y alberga paisajes únicos, desde la Pointe du Décollé pasando por Saint-Malo, Dinard hasta Cancale.
Otro sitio imperdible en Ille-et-Vilaine es el legendario bosque de brocélianda que destaca por sus paisajes de páramos morados, sus valles y sus bocages. ¿Cómo no derretirse ante el espectáculo visual que ofrece este singular bosque, escenario de la leyenda del Rey Arturo?
Terminemos la visita a Ille-et-Vilaine con su rico patrimonio histórico donde conviven tan armoniosamente fortalezas, castillos y abadías. Situadas en lo alto de su promontorio natural, las fortalezas de Fougères, Combourg y Vitré han sido testigos de numerosas batallas medievales en sus patios. Junto a ellos, los castillos de Montmuran, con su puente Lévis, y Rocher-Portail en Maen-Roch con su atmósfera de «Abadía del centro» le invitan a un auténtico viaje en el tiempo.